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IPSA: Ahí vamos 2022
Durante el presente año, el IPSA ha presentado un rendimiento excepcional a pesar del fuerte ajuste de los mercados globales. Es así, como durante los primeros 4 meses del año, el índice accionario local aumentó un 28%, mientras que otros mercados tales como Estados Unidos, Europa y China cayeron un 13%, 17% y 9%, respectivamente, todo en dólares. ¿Cuál es la razón por la cual el IPSA logra desmarcarse tan fuertemente de mercados globales?
En el caso de los mercados globales, estos han sido afectados por temores inflacionarios y consecuentes expectativas de alzas de tasas por parte de las autoridades monetarias.
Pero ¿y en el caso de Chile? La respuesta inmediata es que el país va un paso adelante en el proceso global de alzas de tasas. El Banco Central inició el aumento de la tasa de política monetaria en julio 2021, mientras que la Reserva Federal, en marzo 2022. Este proceso ha conducido a que la actual tasa de política monetaria de Chile sea de 8,25% mientras que la de Estados Unidos de 1,0%. Lo anterior, se ha traducido en que el aumento de las tasas largas en Chile se haya dado principalmente en 2021 mientras que en el caso de Estados Unidos durante el presente año. Por lo tanto, el IPSA ya habría sufrido el efecto negativo del aumento de tasas de descuento en los flujos futuros, mientras que el mundo desarrollado lo comienza a vivir ahora.
Dentro de este contexto, el creciente diferencial de tasas entre las principales economías de Latinoamérica y aquellas de países desarrollados han impulsado los flujos de inversionistas extranjeros hacia la región. Estos últimos, no sólo presionan al alza los precios de los activos financieros, sino que además fortalecen la moneda local, aumentando aún más sus retornos en dólares. Latinoamérica, al igual que Chile, ha mantenido un destacado rendimiento durante 2022. Al cierre de mayo, los índices accionarios de Latinoamérica y en particular de Brasil han rentado un 22% y 25%, respectivamente, todo en dólares, lo que es bastante similar al avance del IPSA.
Es decir, ¿son factores externos los que derrumban los mercados globales, pero impulsan positivamente al IPSA? En parte sí, pero también es necesario analizar factores internos.
Entre estos, el más relevante ha sido la fuerte dinámica de recuperación de resultados corporativos que se vio reafirmada en la reciente entrega del primer trimestre del año. Si bien algunos sectores destacan respecto de otros, en particular materias primas, centros comerciales y financiero, el positivo rendimiento es transversal lo que nos hace estar positivos respecto del valor fundamental de las empresas.
También es relevante incorporar en la balanza, la incertidumbre generada por los procesos políticos y sociales en que nos encontramos, e incluir estos posibles cambios en las proyecciones de resultados y riesgos de las empresas. Frente a escenarios como estos, los inversionistas aumentan fuertemente el retorno exigido de la inversión producto de la falta de visibilidad del valor futuro de los activos y flujos de las empresas. Si bien esta exigencia se mantendrá en el tiempo, ha tendido a moderarse ante el cambio de percepción respecto de la estructura del proceso de cambios. Meses atrás el mercado percibía el plebiscito constituyente como un todo o nada. Volver a ser un país próspero o transformase en una tragedia Latinoamericana más. Actualmente, pareciera incorporar que el proceso será más gradual y consensuado que lo estimado inicialmente.
Durante los últimos meses el IPSA ha mostrado una fortaleza no vista durante mucho tiempo producto del auge del precio de las materias primas, extraordinarios resultados corporativos y percepción de moderación de la incertidumbre. ¿Queda espacio para que siga destacando? Al menos en términos de valoración la respuesta es afirmativa dado que sigue cercana a su mínimo histórico.
Javier Pizarro
Gerente de Research, Banchile Inversiones